En las últimas horas comenzó a circular la foto de un padrillo de jabalí sobre una máquina cosechadora, en un rastrojo de maíz. En la imagen también pueden verse cuatro hombres que trabajaban en el lugar al momento de toparse con el animal silvestre. El hecho tuvo lugar el pasado sábado, 1 de mayo, a unos quince kilómetros del casco de la estancia Tres Bonetes, ubicada entre Lincoln y Vedia, en la provincia de Buenos Aires.

Enganchado

Ante la posición del enorme animal, que se encontraba con el cuerpo elevado del suelo y las patas metidas entre las piezas de la cosechadora, hay muchos usuarios que insisten en que el agricultor fue directamente por el animal al descubrirlo en su siembra, pero la versión oficial de lo que sucedió es que el jabalí quedó enganchado por la cosechadora.

La mayoría de las personas que comenta la publicación hace referencia al mismo hecho: la especie, introducida en el país, se ha convertido en una auténtica plaga, hace mucho daño a las cosechas y se reproduce a un ritmo incontrolable.

Prohibida la caza

En diálogo con Democracia, el titular de Fauna de la Municipalidad de Lincoln, Diego Marchena, dijo que “esta temporada la provincia de Buenos Aires no autorizó la caza de jabalí en nuestra zona” y agregó que “el año pasado, a pesar de haber sido prohibida al inicio, luego se autorizó por el avance de los animales y el daño que generan en los cultivos; no obstante, en la temporada 2021, que se extiende entre mayo y julio, no está autorizada la caza comercial y deportiva de jabalí”.

Presunciones

Según indicaron vecinos rurales de la zona, es frecuente que aparezcan animales de este tipo, incluso de semejante tamaño. Si bien no hay certezas de cómo murió el jabalí en el rastrojo, todo indica que es poco probable que la cosechadora lo haya arrollado vivo, por lo que se presume que lo mataron de un disparo y luego la máquina frenó en

el lugar.

Fuente: (DiarioDemocracia).