La Voz De Todos

La Voz De Todos 27 octubre, 2022

Estudiantes de la Escuela de Educación Técnica N°7 de San Justo, acompañados por el intendente de dicha localidad, directivos y profesores, estuvieron presentes este miércoles en el municipio, con el fin de acercar la primera tanda de canastos de hierro para la basura que serán utilizados en nuestra localidad. Esta entrega surge de un convenio de cooperación recíproca entre el establecimiento educativo y la Municipalidad de Pronunciamiento.

El intendente Ricardo Sandoval valoró el trabajo realizado por los chicos, y agradeció la dedicación y prolijidad para concretar este producto final. «Los canastos son necesarios en el pueblo. Era un tema que habíamos charlado con el área de ambiente. Al mismo tiempo, es importante poder fomentar la educación y la práctica de los estudiantes en el ámbito profesional e industrial», expresó el presidente municipal, y añadió: «Quedan las puertas abiertas y la predisposición para seguir trabajando de la misma manera».

Cabe recordar que el acuerdo firmado en julio con la rectora de la escuela técnica, Sandra Schlotthauer, establecía la finalidad de colaborar en la organización de actividades que vinculen proyectos de mutuo interés para las partes. La escuela dispuso de su organización institucional, profesionales, máquinas, herramientas e infraestructura, mientras que la Municipalidad de Pronunciamiento dio aporte de los insumos correspondientes para realizar cada tarea. «Ojalá que cada vez que usen o vean los canastos, recuerden que lo hicieron los chicos. Es algo útil que queda para el pueblo», dijo la directora de la escuela de San Justo.

El intendente de San Justo, Fernando Viganoni, agradeció a Pronunciamiento por el convenio y el trabajo en conjunto. «Siempre decimos que es importante que los chicos puedan devolverle a la sociedad lo que esta le da. En este caso, los canastos estarán al servicio de la comunidad y es fundamental para continuar con el objetivo de tener una ciudad más limpia», señaló el jefe municipal de la ciudad vecina.

Los estudiantes de 5° y 6° año de secundaria manifestaron la importancia de realizar esta práctica profesionalizante. Medidas, planos, adecuación a los materiales, base, cuadro, canasto, soldadura, ensamblaje, pintura… todas tareas que repartieron en grupos a medida que construían el canasto. Una experiencia sumamente útil para el futuro inmediato o presente en algunos casos. En ese sentido, admitieron junto al profesor que se trabajó con mucha responsabilidad y dedicación para que los canastos de basura reluzcan en el pueblo. Pronunciamiento, por supuesto, agradecido con ello.